30 may 2010

"Hades, El Dios del Inframundo"

Hoooooooooooooooola amigos en esta ocasion les presentare uno de los mitos que mas me gustan... que digo gusta me fascina y me encanta simplemente amo este mito y no es para esperar ya que se trata de......................el amor de mi vida el grandioso Dios del inframundo y de la muerte........... MI AMADO HADES!!!!!!!!!!!!!!!!!! n_n y bueno ya para ponernos serios no perdamos el tiempo y comencemos!!!!!!!!!!!!!

HADES
En la mitología griega, Hades (el ‘invisible’), es el Dios del Inframundo y de los Muertos, hijo del Titán Crono y Rea. Tenía tres hermanas mayores, Hestia, Deméter y Hera, así como dos hermanos menores, Poseidón y Zeus. Juntos constituían la mitad de los dioses olímpicos. Tras hacerse adulto, Zeus logró obligar a su padre a que regurgitase a sus hermanos. Tras ser liberados, los seis jóvenes dioses, junto con los aliados que fueron capaces de lograr, desafiaron el poder de sus padres y tíos en la Titanomaquia, una guerra divina. Zeus, Poseidón y Hades recibieron armas de los tres Cíclopes como ayuda para la guerra: Zeus una lanza de truenos, Poseidón un tridente y Hades un casco que proporcionaba invisibilidad al que lo llevase. En la noche anterior a la primera batalla Hades se puso su casco y, siendo invisible, se infiltró en el campamento de los Titanes y destruyó sus armas. La guerra duró diez años y terminó con la victoria de los jóvenes. Tras esta victoria Hades y sus dos hermanos menores, Poseidón y Zeus, echaron a suertes los reinos a gobernar dividiendoselos asì: Zeus se quedó con el cielo y la tierra, Poseidón con los mares y Hades recibió el inframundo, el reino invisible al que los muertos van tras dejar el mundo.

Hades reinaba sobre los muertos, con la ayuda de sus subditos entre los cuales se destacan los tres jueces del inframundo sobre los que tenía completa autoridad. Prohibió estrictamente a sus súbditos abandonar sus dominios, y se enfurecía bastante cuando alguien intentaba abandonarlos, o si alguien intentaba robarle alguna de sus presas. Aparte de Heracles, las únicas personas 
vivas que se aventuraron en el Inframundo fueron todas héroes: Odiseo, Eneas, Orfeo y Teseo. Ninguno de ellos estuvo especialmente satisfecho con lo que presenciaron en el reino de los muertos

Hades, Dios de los muertos, era un personaje temible y a la vez respetado por aquellos que aún vivían. Sin prisa por encontrarse con él, eran reticentes a prestar juramentos en su nombre. Para muchos, simplemente decir la palabra «Hades» ya era espantoso.

Debido a su personalidad oscura y misteriosa no le tenian un gran aprecio los demas Dioses ni los mortales. Su carácter es descrito como frio y sin sentimientos ademas de cruel y de todos dioses él era el más odiado e incomprendido por los mortales. No era, sin embargo, un Dios malvado, pues aunque era severo, cruel y despiadado, era no obstante justo. Hades gobernaba el Inframundo y por ello era con mucha frecuencia asociado con la muerte y temido por los hombres, pero no era la Muerte: la personificación real de ésta era Tánatos.
El arma de Hades era un cetro de dos puntas, que usaba para destrozar todo lo que se cruzase por su camino o no fuera de su agrado, igual que Poseidón hacía con su tridente. Esta enseña de su poder era un bastón con el que conducía las almas de los muertos hasta el mundo inferior. Sus pertenencias identificativas incluían un famoso casco, que le dieron los Cíclopes y que hacía invisible a cualquiera que lo llevase. Se sabía que a veces Hades prestaba su casco de la invisibilidad tanto a dioses como a hombres. Su carro oscuro, tirado por cuatro caballos negros como el carbón, siempre resultaba impresionante y pavoroso. Sus otros atributos ordinarios eran el narciso y el ciprés, la Llave del Hades y Cerbero, el perro de múltiples cabezas.
Se sentaba en un trono de ébano. Cuando los griegos oraban a Hades, golpeaban sus manos con fuerza contra el suelo para asegurarse de que pudiera oírles. Animales negros, como ovejas, le eran sacrificados, y se cree que en algún momento incluso se le ofrecieron sacrificios humanos. La sangre de los sacrificios a Hades goteaba a un pozo para que pudiera llegar a él. La persona que ofrecía el sacrificio tenía que apartar su cara. Cada cien años se celebraban festivales en su honor, llamados los Juegos Seculares.

1 comentario:

Anónimo dijo...

me gusta buena entrada igual yo quisiera que hablaras de hercules o heracles por que el era un maldito sadico que siempre que se enojaba mataba a doquier que se le crusara y ja me burlo de que para pagar uno de sus homicidios lo vistieron de mujer por un año y lo humillaban. MIL
buena entrada